jueves, 26 de mayo de 2011

La retorcida mente de un crítico de la sociedad

por Kronk


Durante este proyecto cinematográfico, decidí analizar una serie de filmes dirigidas por Martin Scorsese. El verdadero nombre de dicho director es, Martin Marcantonio Luciano Scorsese. Scorsese nació en 1942 en Nueva York, y en 1956, después de haber ingresado a un seminario, decidió reflejar sus gustos y pasiones a través del cine. En 1964 se graduó de la Universidad de Nueva York (NYU) como un “Film major”. Como estudiante hizo varios cortometrajes y después películas, pero fue hasta 1980 que se hizo de gran fama con su película Raging Bull, la cual ganó dos Óscares y fue, según los críticos Roger Ebert y Gene Siskel, la mejor película norteamericana de la década. Su filmografía va desde “Boxcar” hasta su más reciente largometraje, “Shutter Island” lanzado en el 2009.

El filme Taxi Driver fue lanzado en los comienzos de Scorsese, en el año de 1976, y trata de un veterano de la guerra de Vietnam, Travis (Robert De Niro), que es conductor de un taxi. El personaje de Travis va reflejando el odio que le tiene a la sociedad americana a lo largo de la película, y va cruzando la frontera de un ciudadano extremadamente loco y violento. 

La película The Aviator, del 2004, desarrolla una situación similar a la de Taxi Driver en el sentido de que, en ambas, los personajes principales quieren limpiar la sociedad, pues piensan que es rídicula y que está “llena de mugre”. El personaje principal de este filme es interpretado por Leonardo Di Caprio quien hace el papel de Howard Hughes.

Los infiltrados, del 2006, cuenta la historia de Billy Costigan, un policía que pretende ser parte de la mafia de Frank Costello como elemento encubierto, mientras que Colin Sullivan es miembro de la mafia de Costello y finge ser un detective.

Por último, el largometraje Shutter Island producido en el 2009, trata de dos agentes judiciales, Teddy Daniels (Leonardo Di Caprio),  dañado psicológicamente por la Segunda Guerra Mundial, y Chuck Aule (Mark Ruffalo), quienes van a una isla en Boston designada para un hospital psiquiátrico para resolver el caso de la desaparición de una paciente.

Después de ver las películas, pude deducir que a Scorsese le encanta colaborar con ciertos actores una y otra vez, como Robert De Niro y Leonardo Di Caprio. Además, por lo general filma sus películas en la ciudad de Nueva York, muestra fragmentos de la niñez de sus personajes principales y éstos muestran una constante tendencia a estar enojados hacia la sociedad y hacia las mujeres que les llegaron a parecer perfectas en un principio y terminaron desilusionando sus expectativas. No sobra decir que sus personajes siempre sienten que están siendo traicionados por una mafia o complot en su contra, además en varios casos los personajes se encuentran heridos mentalmente a causa de alguna guerra. El estilo predominante en las películas de Scorsese, a mi parecer, es un estilo bastante oscuro que como trasfondo tiene el objetivo de criticar a la sociedad, en especial a la sociedad estadounidense. En esta investigación aprendí a observar más atentamente las tendencias de un director en sus proyectos, y por lo tanto a apreciarlas mejor.

El cínico rodeado de musas

por Sofía de Arrigunaga


Woody Allen nació siendo Allan Stewart Königsberg el primero de diciembre de 1935 en Brooklyn, Nueva York, dentro de una familia que él describe como la típica ruidosa. De adolescente, Allen nunca mostró mucho interés social o intelectual y fue hasta que cumplió diecisiete años que su chispa, esa característica que lo vuelve un director tan particular, salió a la luz. Empezó a publicar chistes en un periódico local bajo el nom de plume de Woody Allen. Tiempo después, intentó estudiar cine pero se acabó saliendo de dos universidades diferentes y se dio a la tarea de perseguir su sueño: tener una carrera como escritor de comedia. Sus chistes se vendían cada vez más, empezó a escribir para un programa de televisión y para 1960 ya estaba haciendo stand-up comedy en varios bares de la ciudad. A la par, contrató a un tutor de la universidad de Columbia para que le enseñara literatura y filosofía.

Su gusto por el cine era innegable. Trabajó escribiendo y dirigiendo el guión de películas como Take the Money and Run (1969) y Bananas de (1971) que caracterizan el inicio de su carrera. Sin embargo, su primer película “seria” y una por la cual siempre será recordado es Annie Hall en la cual participó como director y se volvió Alvy Singer al actuar junto a Diane Keaton. Filmada en Nueva York y ganadora de cuatro premios de la Academia, esta película fue un parte aguas en lo que se volvería una invaluable carrera en el séptimo arte.

Si algo caracteriza a este director es el rol que han jugado ciertas mujeres en sus películas y en su vida con el pasar de los años. Algunas han llegado a ser etiquetadas bajo el nombre de musas y todas se han beneficiado y han disfrutado de trabajar con el director. Empezando por Louise Lasserr, la ya mencionada Diane Keaton y MerylStreep hasta Naomi Watts, Scarlett Johansson y Penélope Cruz. Estas últimas dos trabajaron juntas en Vicky Cristina Barcelona (2008) que se grabó en Estados Unidos y España. Además de rescatar que el director actúa en la mayoría de sus películas, se debe mencionar el humor cínico, de sus guiones y de su persona, que tanto lo caracteriza.

Otro punto importante es el papel que juega la música en las películas de Woody Allen. Ya sea como ambientación o como tema de conversación entre sus personajes, el uso de la música es un elemento importante de su trabajo. Reconocido por utilizar mucha música clásica –Bach, Mahler, Wagner– Allen ha sido mencionado dentro de los directores americanos con más conocimiento musical. Como si fuera poco, se presenta cada lunes junto con su grupo de música en el Café del hotel Carlyle de Nueva York.

Con una afición por retratar las relaciones humanas, temas de muerte y el sentido de la vida, Woody Allen configura a cada personaje con las características más básicas del ser humano a la perfección. Concluyo que es un director de cine con uno ojo especial para observar lo que lo rodea. Como dijo T.S. Elliot, los escritores y artistas son las antenas de nuestra especie. Aquellos capaces de detectar las fibras más delicadas de nuestra existencia y enseñarlas, en este caso, en una pantalla grande.

Este país no tiene solución: Luis Estrada

por Aniceto


Luis Estrada Rodríguez es un productor, director, sonidista, editor y guionista nacido en la ciudad de México el 17 de enero de 1962; y es hijo del también director de cine José “El Perro” Estrada. Luis Estrada inició su carrera cinematográfica siendo asistente de dirección de su propio padre, así como de otros directores, entre ellos Felipe Cazals, Arturo Ripstein y José Luis García Agraz. Al mismo tiempo ingresó a la Facultad de Filosofía y Letras y al Centro Universitario de Estudios Cinematográficos en la UNAM.

Sus más aclamadas y criticadas obras forman una trilogía, compuesta por: “La Ley de Herodes” en 1999; “Un Mundo Maravilloso” en 2006; y “El Infierno” en 2010. Todas ellas producidas en México. En la trilogía, Luis Estrada trata temáticas sobre la vida política y social del México contemporáneo, como lo son la corrupción política, la pobreza y por supuesto, el narcotráfico. El protagonista, respectivo de cada largometraje, es estelarizado por Damián Alcázar, que es considerado uno de los mejores actores del cine mexicano en la actualidad.


Sin duda,  una de las películas más polémicas de Luis Estrada y que más atención trajo, debido a la temática, fue “La Ley de Herodes”. Ubicada en el sexenio de Miguel Alemán, en un pueblo llamado San Pedro de los Saguaros, "La ley de Herodes": “o te chingas o te jodes” es una comedia de humor negro que describe y cuestiona el totalitarismo del priísmo que abusa y se aprovecha de su poder político. Es por esto que la película fue calificada como “anti priísta”.

En conclusión, Luis Estrada es un director  de cine mexicano reconocido mundialmente por su trilogía satírica que, a través del cine, expresa lo que cree sin importar lo que piensen los demás; y eso lo convierte en un cineasta respetable que salió “más cabrón que bonito”.

Grandeza al cuadrado

por Toscana

Dos hermanos, grandes cineastas, estadounidenses de ascendencia judía, estos son Los hermanos Coen: Joel David Coen nacido el 29 de noviembre de 1954, y Ethan Jesse Coen nacido el 21 de septiembre de 1957, ambos nacidos en Minnesota. 

Son autores de películas como O Brother, Where Art Thou?, Burn After Reading, No Country For Old Men, Fargo, The Big Lebowski, True Grit (su última creación) entre muchas otras películas. Ganadores de más de unos cuantos grandes premios como los Oscares, los Globos de Oro, los premios BAFTA y el Festival de Cannes. Estos talentosos hermanos son autores de todas sus películas, pues han consolidado un gran equipo en el que Joel casi siempre dirige y Ethan casi siempre escribe y produce las películas.

Estas últimas dos semanas dediqué mi tiempo a analizar tres de sus filmes más destacados: Fargo, True Grit y The Big Lebowski.  He decidido hacer una descripción general de las características de estas películas y del estilo de estos cineastas. 

Los hermanos Coen son conocidos por la utilización del sarcasmo, la violencia, la ironía, pero especialmente el humor negro; es decir, utilizan temas que son causa de polémica social, ya que tienen relación con la moral, especialmente con temas oscuros y dolorosos para el ser humano. Sus guiones son imprevisibles, pues  el espectador no sabe lo que sucederá con el personaje o como transcurrirá la trama de la película. La utilización de personajes excéntricos es muy común, tomando como un buen ejemplo a Jeffrey Lebowski, protagonista de The Big Lebowski, un vago y jugador de boliche desempleado de Los Ángeles, quien se hace llamar "The Dude”.

Al realizar esta investigación logré descubrir mucho más a fondo el estilo predominante en las obras de estos dos grandes cienastas, que es el humor negro, desarrollado de forma única a lo largo de sus inesperadas escenas.

Un alemán inspirado por el hombre Grizzly

Autor: Por doquier

Werner Herzog, nació en Munich (Alemania) en 1942. En sus años de infancia Werner nunca vio ninguna película, la televisión o usó el teléfono. Cuando vio las maravillas del cine, la experiencia lo inspiró y lo dejó marcado. Durante la escuela secundaria, trabajó jornadas como soldador en una fábrica de acero para producir sus primeras películas e hizo su primera película en 1961 a la edad de 19 años. Desde entonces ha producido, escrito y dirigido diversos documentales y ficciones.

Esta última semana tuve la oportunidad de ver algunas de estos grandiosos documentales dirigidos por Herzog. Uno de los que más me llamó la atención fue “Grizzly Man” (El hombre oso), realizado en el año 2005 en Estados Unidos. El documental trata de  un señor  llamado Timothy Treadwell, camarógrafo, ex alcohólico quien pasó 13 veranos seguidos visitando a los osos Grizzly salvajes en el santuario Grizzly del parque nacional Katmai, ubicado en Alaska. Pasaba sus veranos escondido del gobierno americano, ya que está prohibido acercarse a más de cien metros de un oso Grizzly, pero Treadwell tenía tanta pasión por estos osos que sentía la necesidad de cuidarlos. Los últimos cuatro veranos de su vida, Treadwell grabó grandes imágenes que nadie hubiera podido grabar, imágenes nunca antes captadas. Herzog aprovecha este material grabado por Treadwell y hace una breve crítica sobre el gran cineasta que fue Tradwell, con sus imágenes, su gran perfeccionismo y sus expresiones sentimentalistas.

En este documetal, Treadwell  se me hizo un personaje un poco desadaptado al mundo, ya que a lo largo de su vida tuvo mucho conflictos personales. Herzog me pareció un grandioso director interesado en personajes desadaptados, la salvaje naturaleza y las diferencias culturales entre las personas.